El gobierno de Estados Unidos ha anunciado que extenderá el cierre de su frontera con México y Canadá hasta el 21 de julio, en un esfuerzo por frenar la propagación del COVID-19.
¿Qué significa el cierre de la frontera?
Desde el inicio de la pandemia, los viajes no esenciales entre los tres países han sido restringidos. Esto incluye viajes turísticos y de compras, pero se permite el tránsito de bienes y servicios esenciales, trabajadores transfronterizos y ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes.
¿Por qué se ha extendido la medida?
La extensión se debe a que la pandemia no ha sido controlada por completo en Estados Unidos, y aunque la situación ha mejorado en algunos estados, otros aún están luchando contra el aumento de casos. Además, México y Canadá han visto un aumento en el número de casos en las últimas semanas, lo que aumenta el riesgo de contagio.
¿Cómo afecta esto a los viajeros y turistas?
Los viajeros y turistas que no sean ciudadanos estadounidenses o residentes permanentes no podrán ingresar a Estados Unidos a través de la frontera terrestre hasta nuevo aviso. Los ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes que regresen a Estados Unidos podrán hacerlo, pero pueden enfrentar medidas de cuarentena y pruebas de COVID-19 obligatorias antes de ingresar al país.
¿Qué medidas se están tomando para proteger a los trabajadores transfronterizos?
Los trabajadores transfronterizos que cruzan la frontera diariamente para trabajar en sectores esenciales, como el de atención médica, alimentos y energía, seguirán siendo permitidos en ambos sentidos. Se les recomienda cumplir con medidas de seguridad como el uso de mascarillas y el distanciamiento social.
¿Cuándo se levantará la medida?
La medida será revisada nuevamente antes del 21 de julio y se tomará una decisión sobre si se levanta o se extiende la restricción. La decisión se basará en la situación actual de la pandemia en los tres países y las recomendaciones de los expertos en salud.
El cierre de la frontera entre Estados Unidos, México y Canadá ha sido extendido hasta el 21 de julio en un esfuerzo por frenar la propagación del COVID-19. Los viajes no esenciales siguen siendo restringidos, pero se permite el tránsito de bienes y servicios esenciales, trabajadores transfronterizos y ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes. La medida será revisada antes del 21 de julio para determinar si se levanta o se extiende la restricción.