En días recientes, la compañía Aeroméxico anunció que no operará vuelos desde el nuevo Aeropuerto Internacional de Santa Lucía (AISL), ubicado en el Estado de México. Esta decisión ha generado controversia entre los usuarios y la industria aeronáutica, quienes se preguntan cuál es la razón detrás de esta medida.

¿Por qué Aeroméxico no volará desde Santa Lucía?

La aerolínea ha justificado su decisión en la falta de infraestructura aeroportuaria en el AISL. Según declaraciones de la empresa, el nuevo aeropuerto no cuenta con las condiciones necesarias para garantizar la seguridad de los vuelos y la comodidad de los pasajeros.

A pesar de que el gobierno ha asegurado que el AISL cumple con los estándares internacionales de seguridad, la compañía aérea ha manifestado su preocupación por la falta de instrumentos de navegación y de control de tráfico aéreo, así como por la falta de espacio para la construcción de hangares y talleres de mantenimiento.

¿Cómo afectará esta decisión a los usuarios?

La medida de Aeroméxico supone una limitación para los usuarios que habían planeado utilizar el AISL como punto de partida o destino de sus viajes. Sin embargo, otras aerolíneas como Volaris y Viva Aerobus sí operarán vuelos desde este aeropuerto.

Es importante mencionar que, en cualquier caso, el AISL no será el único aeropuerto en la Ciudad de México. El Aeropuerto Internacional Benito Juárez seguirá operando y será la opción principal para los usuarios que deseen viajar desde o hacia la capital mexicana.

¿Qué alternativas tiene Aeroméxico?

Ante la falta de infraestructura aeroportuaria en el AISL, Aeroméxico ha decidido enfocarse en la modernización y expansión del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. La compañía ha anunciado que invertirá en la construcción de nuevas terminales y en la renovación de su flota de aviones.

Además, la empresa ha señalado que mantendrá su presencia en otros aeropuertos del país, como el de Cancún y el de Guadalajara, donde opera numerosos vuelos nacionales e internacionales.

La decisión de Aeroméxico de no operar vuelos desde el AISL ha generado un debate sobre la viabilidad y la seguridad de este nuevo aeropuerto. Si bien es cierto que la falta de infraestructura aeroportuaria puede limitar el desarrollo de la aviación, también es importante asegurar que se cumplan los estándares internacionales de seguridad para garantizar la comodidad y la tranquilidad de los pasajeros.

Esperemos que en un futuro próximo se puedan solucionar las deficiencias en la infraestructura del AISL y que todas las aerolíneas puedan operar allí con plena seguridad y eficiencia.

por Gaspar

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