La Unión Europea ha anunciado recientemente que ha cerrado sus fronteras a viajeros provenientes del sur de África, en un esfuerzo por detener la propagación de la nueva variante del COVID-19 que ha surgido en esa región.
¿Cuál es la nueva variante del COVID-19?
La nueva variante del COVID-19, conocida como B.1.351, fue descubierta por primera vez en Sudáfrica a finales de 2020. Es una mutación del virus original y se cree que es más contagiosa que otras variantes. La Unión Europea ha tomado medidas para evitar que esta variante se propague aún más en la región.
¿Cómo afecta esto a los viajeros del sur de África?
A partir del 1 de febrero de 2021, la Unión Europea ha prohibido la entrada de viajeros provenientes del sur de África, incluyendo a aquellos que tienen pasaportes de la UE. Los únicos viajeros que se les permitirá entrar serán aquellos que son ciudadanos de la UE y que regresan a sus países de origen.
¿Qué países están afectados por esta restricción?
Esta restricción se aplica a todos los países del sur de África, incluyendo Sudáfrica, Namibia, Botsuana, Zimbabwe, Lesoto, Eswatini y Mozambique. Se espera que esta restricción siga vigente hasta que la situación en la región mejore.
¿Cómo se han visto afectados los viajes y la industria del turismo?
Esta restricción ha tenido un impacto significativo en la industria del turismo, ya que muchos viajeros han tenido que cancelar o posponer sus planes de viaje a Europa. Muchas aerolíneas también han suspendido sus vuelos a la región, lo que ha tenido un impacto en la economía de la región.
Además, aquellos que se han visto afectados por esta restricción también han perdido dinero en reservas de vuelos y alojamiento, lo que ha sido un golpe financiero difícil para muchos.
¿Qué medidas se están tomando para proteger a la población de Europa?
La Unión Europea ha tomado esta medida para evitar que la nueva variante del COVID-19 se propague en Europa. Además de la restricción de viajes, se han implementado medidas adicionales para proteger a la población, como el aumento de las pruebas y la cuarentena obligatoria para aquellos que aún pueden ingresar a Europa.
La restricción de viajes a Europa desde el sur de África ha sido una medida necesaria para proteger a la población de Europa de la nueva variante del COVID-19. Aunque ha tenido un impacto significativo en la industria del turismo y en aquellos que se han visto afectados por la restricción, es importante recordar que la salud y la seguridad de la población deben ser la máxima prioridad en estos momentos.
Manuel 
Yousef Ranzi