Qué ver en Girona: Guía Completa 2025
Si alguna vez te has preguntado qué ver en Girona para saborear su esencia y llevarte un recuerdo que no se borre fácil, estás en el sitio indicado. Girona te sorprenderá con una combinación irresistible: historia que se palpa en cada piedra, calles que parecen sacadas de un cuento y una vida cultural que despierta a cada rincón. Te lo digo por experiencia, recorrer sus lugares emblemáticos mientras te dejas llevar por el ritmo relajado de la ciudad es un plan que no defrauda.
En esta guía vas a encontrar un recorrido por los monumentos y espacios que condensan lo mejor de Girona. No te dejaré sin contar esas experiencias que hacen que la visita trascienda lo típico: paseos con vistas que quitan el hipo, actividades que harán que veas la ciudad con otros ojos y hasta escapadas cercanas que completan la aventura. Así que agárrate, que Girona te espera con sus historias y secretos a la vuelta de cada esquina.
Los monumentos y lugares históricos imprescindibles en Girona
Girona tiene ese toque especial de ciudad vieja que no se guarda nada, que grita su historia en cada esquina y que invita a perderse sin prisa. Entre sus calles empedradas se esconden monumentos que no solo cuentan el paso del tiempo, sino que reflejan la mezcla cultural que ha moldeado la ciudad.
Desde la imponente Catedral, cuyo interior y arquitectura barroca no dejan indiferente, hasta el antiguo barrio judío, un laberinto de calles estrechas y rincones que te trasladan a siglos atrás, cada lugar tiene su historia que merece la pena devorar despacio. Pasear por la muralla, que abraza la ciudad, te dará una panorámica diferente, mostrando Girona desde otro ángulo que te va a encantar, además de bajarte unas cuantas calorías.
Lo que sí te aconsejo es que reserves al menos un par de días para no quedarte con sabor a poco, y si quieres evitar las aglomeraciones, madrugar será tu mejor aliado. Así podrás experimentar la ciudad cuando la luz se cuela tímida entre las torres y calles casi vacías. Seguro que te llevas fotos para presumir un buen rato.
Jardines de la Dehesa
Este pulmón verde es algo más que un parque grande en la ciudad. La Dehesa invita a perder la definición del tiempo sentado bajo su sombra o paseando entre sus árboles que han resistido décadas. No es raro ver a gente local haciendo deporte, familias escogiendo un rincón para ese picnic de fin de semana o simplemente paseantes disfrutando del aire fresco.
La flora del parque es variada y favorece una escapada natural sin salir de la ciudad, desde árboles centenarios hasta pequeños parterres que aportan color y vida. Además, cuenta con servicios para que la visita sea cómoda, incluyendo zonas infantiles y bancos repartidos estratégicamente para descansar o simplemente mirar y dejarse llevar. Si te apetecen actividades, en ocasiones organizan eventos al aire libre, una buena excusa para mezclarse con el ambiente local.

Actividades y experiencias únicas en Girona
Visitar Girona puede ser mucho más que seguir un mapa al pie de la letra. Lo que te recomiendo es que te apuntes a alguna de esas actividades que te harán ver la ciudad desde otra perspectiva: tours guiados donde los guías se harán cómplices para contarte anécdotas jugosas, recorridos en segway para no cansarte y sentir el viento, o experiencias gastronómicas porque la comida aquí tiene un no sé qué que invita a probar cada plato.
Imagínate recorrer el casco antiguo mientras escapas del grupo grande, o disfrutar de una cata de vinos locales en un ambiente distendido. Estas vivencias no solo suman puntos a tu viaje, sino que te conectan con la Girona auténtica, la que no siempre aparece en las postales. Además, probarás que no todo es historia; la ciudad tiene un lado moderno que mezcla lo tradicional con la frescura de la innovación.
Así que, ya sea que elijas caminar a tu ritmo o agregarle un toque de aventura con actividades distintas, te llevarás mucho más que fotos; experimentarás Girona como si formaras parte de ella por un rato.
Consejos para visitar Girona
Si quieres sacarle todo el jugo a tu visita a Girona, te conviene planificar un poco y tener en cuenta ciertos truquitos que he aprendido en mis escapadas. Primero, la mejor época para venir suele ser la primavera o el otoño, cuando las temperaturas son agradables y la ciudad no se llena hasta los topes de turistas.
Moverse por Girona es bastante sencillo, y la mayoría de sus atractivos están a un paseo cómodo. Eso sí, tus mejores aliados para evitar las multitudes serán madrugar y elegir días de semana si puedes. Ah, y no te olvides de calzado cómodo porque las calles empedradas pueden jugarte una mala pasada si llevas zapatos inapropiados.
Atento también a los horarios, especialmente de monumentos y museos, que a menudo cierran a primera hora de la tarde o tienen días específicos en los que no están abiertos. Consultar antes será tu salvavidas para no quedarte con las ganas. Por último, si quieres moverte rápido y original, alquilar una bicicleta o segway puede ser una opción genial para saltarte las calles más transitadas.
Lugares cercanos para visitar desde Girona
Ahora bien, si ya has saboreado Girona y te apetece estirar un poco el viaje, no te faltarán sitios cercanos que te harán ganar puntos viajeros. En pocos kilómetros puedes plantar los pies en pueblos con encanto como Besalú, con su puente medieval de película, o Calella de Palafrugell, donde el mar y sus calitas te harán querer quedarte más tiempo del planeado.
No te sorprendas si acabas descubriendo rincones que no sabías que existían, mientras conduces o tomas un tren. La región alrededor de Girona tiene mucho que contar y explorar, desde paisajes naturales hasta pequeñas joyas históricas que completan la experiencia de forma magnífica. Así que, si tienes días extra, poner estas escapadas en la lista será un acierto.
Catedral de Girona
La Catedral de Girona no es solo un edificio grande y bonito que ver; es un protagonista con mucha historia que contar. Su construcción empezó allá por el siglo XI y aunque pueda parecer que la gente de hace siglos no tenía prisa, el tiempo que tardaron en acabarla le añadió esa mezcla de estilos únicos que la hace especial.
La fachada ya te dejará helado, pero esperando a que pongas un pie dentro, donde la luz y el espacio te envolverán. La nave única más ancha del mundo gótico y su imponente escalera solo son el inicio. Además, si te animas, la torre te promete vistas que difícilmente olvidarás. Eso sí, intenta visitar temprano para evitar colas o hacerlo fuera de temporada alta.
![]()
Paseo de la Muralla (Passeig de la Muralla)
¿Te imaginas caminar entre las alturas que rodean Girona, casi rozando el cielo? Pues eso es lo que te deparará el Paseo de la Muralla, un recorrido que non solo tiene un valor histórico enorme sino que también te regala vistas espectaculares al casco histórico y a las colinas circundantes.
La muralla fue construida con la idea clara de proteger la ciudad y hoy, mientras caminas, entenderás un poco más de aquella época con torres y baluartes que aún se mantienen firmes. La ruta puede ser un poco exigente, con subidas y bajadas, pero vale cada esfuerzo porque al final te espera una mezcla de historia, naturaleza y esas fotos que todos querrán ver.

Barrio Judío (Patronat Call de Girona)
Explorar el barrio judío en Girona es como abrir un libro antiguo que se hace presente en cada esquina. Este espacio, cargado de historia y cultura, fue hogar de una comunidad vibrante que dejó huella en la ciudad. Caminar por sus calles estrechas y empedradas es hacerlo por el tiempo mismo.
Además del valor arquitectónico que encontrarás en los edificios y calles laberínticas, recomiendo que no te pierdas las pequeñas plazas y rincones secretos donde la luz dibuja sombras llenas de misterio. Aquí la historia de convivencia y conflicto se siente más cerca, y es inevitable dejarse llevar por las historias que han sobrevivido a los siglos. ¡No olvides la cámara!

Puente de Hierro (Pont de Ferro)
Este puente no es cualquier puente; aunque pequeño, se lleva todas las miradas cuando llega el momento de la foto icónica de Girona. El Puente de Hierro, diseñado por Gustave Eiffel —sí, el mismo de la torre— conecta la ciudad cruzando el río Onyar y se ha convertido en una postal casi obligatoria.
Además de su valor arquitectónico, es ideal para una caminata tranquila mientras disfrutas la vista hacia las casas de colores que bordean el río, una estampa que no te cansarás de admirar. Te aconsejo visitarlo al atardecer, cuando la luz calienta las fachadas y la ciudad se tiñe de un tono mágico.

Museos y espacios culturales destacados
Si eres de los que disfruta empaparse de la cultura local, Girona tiene museos que harán que no quieras salir tan rápido. El Museo de Historia de los Judíos destaca porque te introduce en la vida y costumbres de la comunidad que dio forma a buena parte del casco antiguo.
Además, el Museo del Cine es una joya para quienes sienten pasión por las imágenes en movimiento. Sus colecciones y exposiciones te llevarán en un viaje desde los inicios del cine hasta las técnicas más modernas, todo contado con un toque interactivo que atrapa tanto a pequeños como a grandes.
Estos espacios no solo son para mirar cuadros o objetos, sino para sentir y aprender, cada uno con una personalidad única que contrasta de forma interesante con la experiencia más tradicional que podrías tener en otras ciudades.
Museo de Historia de los Judíos
El Museo de Historia de los Judíos no se conforma con ofrecerte objetos antiguos; aquí se vive la historia. Sus salas narran la vida de la comunidad judía en Girona con exposiciones que logran que te transportes directamente a esa época.
Lo más destacable es cómo combina los elementos históricos con una puesta en escena que hace que no te canses de aprender. Para aprovechar la visita al máximo, te recomiendo que te tomes tiempo para absorber cada detalle y quizá apuntes tus preguntas para el guía, si decides hacer una visita con explicación.
Museo del Cine
El Museo del Cine de Girona es como entrar en una máquina del tiempo que te llevará por las etapas más importantes del séptimo arte. Sus colecciones incluyen desde cámaras antiguas hasta material interactivo donde puedes probar efectos y técnicas que usaron los grandes del cine.
Además, suelen organizar actividades y proyecciones que hacen que la visita sea algo más que mirar vitrinas. Si te gusta el cine o simplemente buscas una experiencia cultural diferente, este museo atrapará tu atención y te alejará un poco de la moda de museo clásico, para dar paso a algo dinámico y entretenido.

Naturaleza y parques para disfrutar al aire libre
Después de patear la ciudad y empaparte de historia, seguro que necesitarás un respiro en algún lugar donde el verde sea protagonista. Girona no decepciona y tiene parques y espacios naturales geniales para sentarte, respirar hondo y dejar que el estrés se desvanezca.
Además del famoso Parque de la Dehesa, la ciudad está rodeada de áreas donde puedes hacer senderismo, correr o simplemente pasear con calma. Estos espacios son perfectos para los más tranquilos que buscan un rato de paz o para familias y grupos que quieran un picnic con buen ambiente. Yo he comprobado que pasear al atardecer por estos parques es uno de esos pequeños lujos que hacen que la visita quede grabada por siempre.
Si te animas, también hay opciones para actividades al aire libre que sumarían todavía más diversión a tu viaje, como rutas guiadas por la naturaleza o spots para hacer deportes al aire libre. En definitiva, después de todo lo cultural, la naturaleza aquí es el mejor complemento.
